Andorra quiere dar más a conocer su sistema financiero, sus bondades y quitarse de una vez por todas la espinita del pasado de ser un país opaco. Considera que eso es el pasado, y está dando pasos para ser más transparente y jugar con las mismas reglas que en el resto de Europa.
De momento, el ministro de Finanzas del Gobierno de Andorra, Jordi Cinca, ha asegurado hoy que el país quiere iniciar en apenas dos meses, en septiembre, el intercambio automático de información fiscal con España, que ahora se realiza únicamente bajo demanda.
En una jornada informativa organizada por el Gobierno andorrano y por la patronal bancaria del país, Andorran Banking, Cinca ha adelantado que el objetivo es que el intercambio automático de datos sea efectivo ya el primer año con 41 países, que serían todos los de la Unión Europea y otros 13 de la OCDE. La cifra, ha añadido, iría aumentando paulatinamente y superaría los 80 países en 2020.
Además, espera adherirse al Fondo Monetario Internacional (FMI) el año que viene, lo que le permitirá, no solo abrir su imagen de transparencia ante la vigilancia de este organismo, sino sobre todo contar con un organismo que le permitirá obtener préstamos si lo necesita, algo que al carecer también de un banco central le resulta muy positivo, según explicaron banqueros y políticos en estas jornadas. La participación del Principado en el organismo de gobernanza financiera internacional dará más estabilidad y credibilidad al sistema financiero andorrano.
Su sistema bancario también busca la transparencia a toda costa, y no descarta en un futuro contar con un banco central doméstico, aunque no sea andorrano. Consideran que lo mejor es adherirse a alguno de los ya existentes en los países vecinos como el Banco de España o el Banco de Francia.
Sobre el intercambio de información que ha anunciado Cinca, hasta el momento, solo existe el intercambio de información fiscal con otros países bajo demanda, por lo que se trata de un avance considerable, que se une a otros alcanzados en los últimos años, como los acuerdos de doble imposición fiscal o las distintas medidas alcanzadas para prevenir el blanqueo de dinero, ha recordado el ministro.
Todo ello, ha explicado Cinca, con el objetivo de adaptar la normativa fiscal y bancaria a la de los países del entorno, especialmente los de la UE, con el fin de que Andorra sea percibida como un destino fiable y transparente para las inversiones extranjeras, lo que en la práctica es una apertura económica en toda regla.
Powered by WPeMatico