Esto supuso un incremento del 575% respecto al mismo mes del año anterior. Asimismo, el año arrancó con un incremento del número de trabajadores que participaron en estas huelgas del 622%, hasta sumar 47.090 trabajadores. Estos fuertes incrementos de la conflictividad laboral en enero se produjeron fundamentalmente por la huelga de taxistas, que supusieron alrededor del 90% de los huelguistas y de las horas de trabajo perdidas en enero pasado, según los datos facilitados hoy por la patronal CEOE-Cepyme, que contabiliza las jornadas no cotizadas por estos trabajadores.
No obstante, el número de huelgas (49) registradas en enero, disminuyó un 15,5% respecto a hace un año. Pero atendiendo a motivos estrictamente laborales –aquellos que no están derivados de huelgas de servicios público o motivaciones sociopolíticas– el número de paros descendió aún más, un 30% hasta las 28 huelgas. En ellas participaron 4.871 trabajadores y se perdieron 295.114 horas de trabajo.
Según estos mismos cálculos empresariales en todo 2018 tuvieron lugar 601 huelgas, en las que participaron 980.388 trabajadores, que perdieron 15.846.504 horas de trabajo. Estas cifras supusieron un descenso del 22% del número de huelgas; un 50% menos de trabajadores implicados y un 35,6% horas perdidas menos.
Estos descensos de la conflictividad laboral se produjeron teniendo en cuenta la incidencia que tuvieron en 2017 las huelgas del sector de transportes y comunicaciones de abril a agosto, especialmente en el taxi -que se repitieron noviembre-; de estibadores en junio y de estudiantes, en Cataluña, en apoyo del referéndum independentista en septiembre, octubre y noviembre de dicho año. Así como las derivadas en 2018 por la huelga convocada el Día Internacional de la Mujer y la de estudiantes en Cataluña frente a la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española y en toda España ante la sentencia de “La Manada”.
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