El presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), José Luis Escrivá, quien ha recordado la opinión elaborada por este organismo a principios de este año, ha instado al Gobierno a abordar los problemas financieros de la Seguridad Social.
Concretamente, Escrivá ha apostado por dos medidas para contener el incremento del gasto en pensiones de tres puntos –del 11,7% a casi el 15%– previsto hasta el inicio de la década de 2040 a 2050. La primera de estas soluciones de la Airef consistiría en profundizar en el retraso de la edad de jubilación hasta los 67 años aprobada en 2013 y actualmente en periodo de implantación hasta 2027. En su opinión si la edad efectiva media a la que se jubila la mayoría (no la legal) se acercara lo más posible a esos 67 años, «se corregiría la mitad del problema de gasto previsto». Actualmente, la edad efectiva de retiro ronda los 63 años.
La segunda de las soluciones aportadas hoy por Escrivá consiste en prolongar a toda la vida laboral los años que se tienen en cuenta para calcular la cuantía de la pensión. Actualmente se tienen en cuenta los últimos 22 años y aumentarán progresivamente hasta los últimos 25 años a partir del año 2022. Con este alargamiento de los años cotizados que computan para la pensión, «se arreglaría otra parte muy significativa» del déficit del sistema.
Junto a estas medidas paramétricas, el responsable de la Airef coincidió con los representantes sindicales en reestructurar los gastos de la Seguridad Social, haciendo que algunas prestaciones menos contributivas como la viudedad y la orfandad; las políticas activas de empleo y las ayudas a la contratación; o los gastos de funcionamiento del sistema se paguen con impuestos en lugar de con cotizaciones sociales. De esta forma, podrían liberarse más de 15.000 millones anuales de ingresos por cuotas.
«Ese déficit debe visualizarse donde debe estar, que es en el Estado, porque visualizarlo en la Seguridad Social es desviar la solución del problema», ha añadido Escrivá.
Powered by WPeMatico