Así lo ha declarado a los medios en la inauguración del XXIX Congreso de la Organización de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE), que se celebra hoy y mañana en Zaragoza. Montero ha abogado por «armonizar los impuestos de Patrimonio y Sucesiones» para que los grandes patrimonios paguen lo que deben en todos los territorios.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido su apuesta por impulsar una reforma de la financiación autonómica, si el PSOE gana las elecciones del 10N, a fin de mejorar el reparto de fondos entre los diferentes territorios. En esta línea, Montero ha apostado por la necesidad de «armonizar» los diferentes gravámenes que, en materia de Patrimonio o Sucesiones, afectan a las grandes fortunas en los diferentes territorios.
«No se trata de obligar a nada, sino de hacer una revisión fiscal que permita que los impuestos a la riqueza tengan sentido», para que esas figuras tributarias correspondan a la realidad sin limitar la autonomía de las distintas comunidades.
«Aquellas comunidades autónomas con más ingresos, como Madrid por ser sede fiscal de la mayoría de empresas, tienen la capacidad de bajar más los tributos frente a otras que no pueden» a no ser que mermen sus servicios sociales, ha reflexionado.
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