El coronavirus ha colapsado los mercados financieros. Hoy las Bolsas europeas se preparan para otra sesión negra, de pánico y ventas masivas, a medida que la pandemia se extiende. Las Bolsas han perdido una cuarta parte de su valor en tres semanas, y hoy la apertura amenaza con llevarse otro 5% del mercado. Además de la propagación de la pandemia y de un impacto económico casi incalculable, las confusas medidas adoptadas por Estados Unidos al restringir la entrada de viajeros desde la UE han añadido leña al fuego de las ventas.
En su alocución pública el presidente adelantó que se verá restringidas las entradas tanto de personas como «de mercancías, cargamento y muchas otras cosas». La perspectiva de un colapso comercial hundió los mercados, por lo que posteriormente la Casa Blanca, y el propio Trump vía Twitter, rectificaron asegurando que el cierre de fronteras no se aplicará al comercio. En todo caso, los inversores tienen ahora focos de riesgo con los que no contaban ayer: nuevos colapsos del comercio y la impulsividad del líder de la primera economía del mundo.
Así, según indican los mercados de futuros, el Eurostoxx abrirá desplomado, con una caída del 5,29%. Los futuros estadounidenses también están hundidos: bajan el 3,5% después de que ayer el S&P 500 registrase un desplome de casi el 5%. En el mercado solo manda la liquidez, que gestores e inversores consiguen vendiendo todo lo que se pone a tiro. En Asia el índice Nikkei baja más del 4%, y emergentes como Brasil se han hundido más del 7%.
«Para quienes esperaban medidas que ayudasen a compensar la caída del consumo han sido malas noticias», explicaba a Bloomberg un analista. Los mercados preveían un recorte del impuesto sobre la renta para impulsar la economía, pero se han topado con medidas que seguramente agraven la caída.
Hoy el BCE dará respuesta a la necesidad de estímulos monetarios en Europa, después de que tanto la Fed como el banco de Inglaterra hayan recortado tipos en sendas reuniones de emergencia. La autoridad de Fráncfort ha mantenido el calendario, pero los inversores esperan hoy que anuncie nuevas compras de deuda y préstamos bonificados a los bancos que den créditos. Los inversores también esperan un recorte del interés del 0,1%, desde el -0,5% actual, si bien esta medida puede deteriorar aún más la actividad bancaria.
En este imposible contexto, la deuda sigue siendo el principal activo refugio: la de Estados Unidos está en el 0,741%, 13 puntos básicos menos que ayer. El euro cotiza en 1,129, después de bajar ayer con fuerza, y el petróleo sigue en el entorno de los 35 dólares.
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