El ingreso medio por persona en España es de 11.680 euros, cifra que supone un incremento del 2,3% y el dato más alto desde 2010, que es hasta donde se remonta la Encuesta de Condiciones de Vida que realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, ese repunte es al mismo tiempo el más moderado desde 2014, cuando se revirtió la senda de caídas que desató la crisis financiera. Y, más importante, una de cada cuatro personas sigue todavía en una situación de riesgo de pobreza o exclusión social.
Así lo concluye Estadística en la citada encuesta, cuya última edición ha publicado este martes. El trabajo es relativo a 2019, pero confeccionado con datos de ingresos de 2018, por lo que desde ese momento se han podido producir cambios más o menos significativos. Pero incluso así, lo que evidencia tanto el trabajo del último año como la evolución de los últimos es que el ingreso medio por persona muestra datos moderados, y que España presenta un notable problema de personas en riesgo de pobreza y familias con una capacidad adquisitiva muy limitada.
Buena muestra de esto último es el INE señala también que un 33% de las familias asegura no tener capacidad para irse una semana de vacaciones, y un porcentaje muy similar «no tuvo capacidad para afrontar gastos imprevistos». Y a ello hay que sumar que «el 7,4% de los hogares españoles manifestó llegar a fin de mes con «mucha dificultad» en 2019″.
En todos los casos, las cifras suponen una mejora respecto a las de la encuesta anterior y muestran una situación sustancialmente mejor que la de los años más duros de la crisis financiera. Sin embargo, los datos siendo muy elevadas y un punto de partida muy negativo para el empeoramiento que se espera en futuros trabajos como consecuencia de la crisis del coronavirus. Probablemente en la encuesta del próximo año, que hará referencia a 2019, todavía se recogerá una mejora adicional, pero a medio plazo las cifras amenazan con volver a disparase.
El INE ofrece también una aproximación a sus datos en función de la edad, el nivel de estudios y los lugares de residencia. Y en lo que al riesgo de pobreza o exclusión se refiere, muestra cifras especialmente negativas para los menores de 16 años: en esa franja, el 25% de media repunta hasta llegar al 30%.
Un comportamiento similar se observa atendiendo al nivel de estudios, ya que la tasa llega también a niveles del 30% entre la población con educación primaria o inferior, mientras que entre la que alcanzó la educación superior la cifra es del 13%.
Y entre comunidades autónomas, la disparidad en los ingresos medios por persona es tan notable que mientras que el dato de población en riesgo de pobreza o exclusión supera el 35% en Canarias y Andalucía, en País Vasco y Navarra la cifra se queda por debajo del 15%. La Región de Murcia y Castilla-La Mancha también rebasa el 30%, y Castilla y León, Baleares, Madrid, La Rioja o Cataluña se sitúan por debajo del 20%.
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