La crisis hotelera en España va por su décimo mes y la luz al final del túnel todavía se ve muy lejos, entre cuarentenas, restricciones de movilidad y reducciones de vuelos. En este contexto, el presidente de la patronal hotelera Cehat, Jorge Marichal, exige un plan de rescate al sector. «No podemos seguir con paños calientes, el sector languidece», recalca en una improvisada carta a los Reyes Magos, en la que alerta de que si no se activa ese plan de choque se perderán miles de puestos de trabajo y cerrarán miles de empresas.
Entre las peticiones de la patronal destaca la de la extensión de los ERTE de fuerza mayor durante todo 2021, así como de la bonificación de la Seguridad Social para los trabajadores afectados. Las grandes cadenas hoteleras apenas han podido recuperar entre un 25% y un 50% de sus trabajadores en ERTE y todo apunta que al menos hasta verano, cuando el calendario de vacunación esté avanzado, esas cifras no mejorarán.
Los hoteleros también exigen una rebaja del IVA que grava su actividad del 10% al 7%, en línea con lo que han hecho otros países como Reino Unido, Alemania o Grecia, así como la exoneración de una parte importante de los impuestos municipales, ya que una gran parte de la cadena hotelera sigue cerrada. Entre esos tributos se encuentran el IBI, el IAE, la tasa de residuos urbanos, la de paso de vehículos o la de ocupación de la vía pública. A estas reivindicaciones de los hoteleros, reclamadas con insistencia desde marzo de 2020, se ha unido la de la exoneración de los costes fijos de contratación de potencia eléctrica.
En la misiva, los empresarios, conscientes de que en marzo van a tener que empezar a devolver los créditos concedidos a través del ICO, reclaman una ampliación del plazo para la devolución de los mismos y tipos cero para los préstamos ya concedidos. Marichal exige también medidas para reactivar la demanda. «Para que el turismo vuelva a ser lo que era en nuestro país, solicitamos un programa de bonos turísticos y un pasaporte sanitario digital para garantizar una movilidad y un turismo seguros. Es necesario empujar la demanda con medidas concretas para cuando una parte significativa de la población esté vacunada e inmunizada y con unas recuperadas ganas de viajar y volver a la normalidad perdida».
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