El Gobierno, a través del Ministerio de Trabajo, está negociando con los agentes sociales y las comunidades autónomas incentivar la contratación prioritaria de ciertos «colectivos con mayores dificultades para la incorporación al mercado de trabajo, por ejemplo, los nuevos perceptores del ingreso mínimo vital», según consta en el documento de la Nueva Estrategia Española de Apoyo Activo al Empleo 2021-2014. Como ya adelantó este diario, la estrategia contempla 27 medidas ligadas a las políticas activas de empleo. Fuentes de la negociación confirman a este diario que el Ministerio de Trabajo, que les solicitó las opiniones sobre el documento, no les ha convocado todavía para negociar posibles cambios, a pesar de que existe mucha prisa por parte del departamento que lidera Yolanda Díaz de aprobar la estrategia de los próximos cuatro años.
Cabe recordar, más allá, que la incorporación de los beneficiarios del ingreso mínimo vital al mercado laboral es uno de los principios básicos de la prestación aprobada por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, toda vez que el ser beneficiario del ingreso mínimo va asociado a itinerarios de formación para el empleo, acceso a determinados puestos de trabajo en los supuestos que así lo permiten o itinerarios de inclusión social en los casos más extremos.
En este sentido, uno de los puntos llamativos de las doce enmiendas introducidas por Unidas Podemos al proyecto de ley del ingreso mínimo vital es la mayor facilidad que reclama para que quienes hayan gastado las prestaciones y subsidios por desempleo puedan acceder a la ayuda lo más pronto posible y no tengan que esperar el periodo de carencia hasta poder solicitar el ingreso mínimo vital.
«Con la regulación actual, quienes agoten un subsidio no contributivo de desempleo (o una prestación contributiva si no tienen derecho a alguno de los subsidios existentes) y no tengan otra fuente de ingresos quedarán desprotegidos por haber estado percibiendo un subsidio lo que les obliga a que transcurra un período de carencia antes de acceder al ingreso mínimo», argumenta Unidas Podemos, que además señala esto supone una «clara desprotección de las personas desempleadas» a las que se les está imputando como ingresos una renta en concepto de desempleo que ya han dejado de percibir. «Tal interrupción de la actuación protectora de la Seguridad Social está totalmente injustificada», sentencia la formación morada.
Por ello, reclaman que en el proceso de aprobación parlamentaria se excluya del cómputo de rentas las prestaciones por desempleo, en todas sus modalidades, siempre que se haya agotado su percepción en el momento de solicitar el ingreso mínimo y no se tenga derecho a una nueva prestación por desempleo en cualquiera de sus modalidades. También reclaman que se excluya a las ayudas públicas concedidas por razón de hallarse en situación de dependencia o las pensiones compensatorias y las anualidades por alimentos que no hayan sido efectivamente satisfechas. Así como la cuantía de las pensiones compensatorias a favor del cónyuge y las anualidades por alimentos satisfechas por el solicitante.
Powered by WPeMatico