El impuesto extraordinario sobre la banca que propuso el líder del PSOE, Pedro Sánchez, para ayudar a sostener el sistema público de pensiones sería un «recargo» del Impuesto de Sociedades del 8%, ha explicado hoy el secretario de Economía de los socialistas, Manuel Escudero.
Escudero ha señalado, en una entrevista en la Ser, que «se trataría de un impuesto complementario al de Sociedades sobre la misma base tributable y con un tipo del 8%». Tras recordar que su propuesta hecha ayer está «inspirada bastante» en la de la tasa de sobrecargo que el gobierno conservador de David Cameron aprobó en 2016 en Reino Unido, el dirigente socialista ha cuantificado su potencial recaudador en 870 millones de euros anuales, en términos de la base imputable de 2015.
Escudero, que ha negado que el afán de venganza hacia el sector bancario guíe su planteamiento, ha defendido que este recargo contribuye «clarísimamente» a la estabilidad financiera, ya que ésta requiere que la banca asuma menos riesgos.
El PSOE calcula el “potencial recaudador” de este tributo en 860 millones de euros y defiende que no responde a un ánimo de venganza contra la banca, sino a un “planteamiento muy estricto de resolver el problema” del déficit de la Seguridad Social, que se calcula en 15.000 millones de euros en 2018. “Si es necesario recurrir a impuestos no vamos a incrementar el de las clases medias y trabajadoras”, razonó ayer el responsable de Economía del PSOE en la Cadena Ser.
Los socialistas vinculan esta medida con el rescate público al sector financiero. “Es de justicia social que, si la banca recibió un rescate de 77.000 millones de euros, se le pida contribuir cuando tenemos en el sistema de Seguridad Social en una situación casi de emergencia”, incidió Escudero. “Rescate por rescate”, resumió.
Powered by WPeMatico