España ya cuenta con dos ciudades en el top cinco mundial de las urbes que atraen un mayor número de congresos. Barcelona mantiene el liderazgo mundial en volumen total de congresistas, pero en número de congresos celebrados ha caído del primer puesto al cuarto. Madrid ha aprovechado su caída para avanzar hasta la tercera posición, superada sólo por París y Viena.
El retroceso de Barcelona en el ranking de la ICCA para 2018 se produce por una caída del número de congresos del 16,4%, hasta los 163 eventos. Desde Turisme de Barcelona, el director del área de turismo de negocios, Christoph Tessmar, restó relevancia a la caída y recordó que lo importante es que la ciudad mantiene el liderazgo en volumen de congresistas, con 135.000 asistentes en 2018.
Tessmar aseguró que no se tiene constancia de que se haya perdido un solo congreso por culpa del proceso soberanista y justificó la caída por compararse con 2017, que había sido un año récord. Tampoco se puede demostrar, dijo, que Madrid, donde el número de congresos aumentó el año pasado un 7,8%, hasta los 165 eventos, haya aprovechado el descenso de la capital catalana para ganar congresos.
El directivo del consorcio público-privado Turisme de Barcelona asegura que «Barcelona sigue siendo un destino top» y que 2019 será un gran año para la actividad de congresos. «Ya sabíamos que no podíamos mantenernos en el número uno porque los congresos son rotativos». Según sus previsiones, siguiendo los baremos de la ICCA, que sólo tiene en cuenta eventos rotatorios de un mínimo de cincuenta asistentes, este año Barcelona podría elevar de nuevo el número de congresos hasta los 180.
La amenaza independentista no ha provocado la cancelación de ningún congreso, aunque todavía es pronto para saber si ha afectado a la contratación de nuevos actos, puesto que éstos se organizan con unos tres años de antelación.
A lo que sí ha afectado es al turismo de reuniones y convenciones. Desde la patronal hotelera de Barcelona, alertan que, en los últimos cuatro años, el turismo de reuniones ha disminuido un 10%. El presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Clos, responsabiliza al proceso independentista de parte de la caída. Por un lado, por el negocio que han perdido los hoteles por la fuga de las 5.000 sedes sociales fuera de Cataluña. El traslado de los consejos de administración y otras reuniones similares a otras ciudades españolas ha supuesto la pérdida de noches de hotel, gasto en restauración y alquiler de salas para los hoteles de Barcelona. Además, los conflictos en la calle y manifestaciones han alejado a posibles convenciones empresariales, alerta Clos.
Por el momento, la caída de Barcelona ha sido compensada por el crecimiento de otras ciudades españolas y el balance en España es positivo, con un total de 595 congresos en 2018, un 5,5% más. El país ha avanzado hasta la tercera posición mundial del ranking de la ICCA, por detrás de Estados Unidos y Alemania y por delante de otros como Francia y Reino Unido.
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