El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, reclamó ayer solidaridad y eficiencia en el uso de los recursos de la Unión Europea e hizo un renovado llamamiento a una «respuesta ambiciosa y coordinada a escala europea» para hacer frente a la grave crisis del coronavirus, cuyos efectos sobre la economía «van a ser muy significativos en el corto plazo». Para Hernández de Cos, «la emisión de eurobonos es una forma de dar esa respuesta europea.
Si no es ahora, ¿cuándo?», se preguntó el también miembro del Consejo de Gobierno del BCE, que lanzó este mensaje desde el corazón mismo del país que más se resiste a la mutualización del riesgo, Alemania. Lo hizo a través de una entrevista en el diario económico germano Handelsblatt, en la que el gobernador del Banco de España redobló las alertas sobre la dimensión de la crisis, que, tal como subrayó días atrás, hará que los esfuerzos individuales de los Estados sean, por sí solos, insuficientes para afrontar una «perturbación sin precedentes».
«Es hora de ser solidarios y eficientes en el uso de los recursos de la UE, que son muchos», resaltó Hernández de Cos, quien admitió que «existe una posibilidad real de que el conjunto de la zona euro entre en recesión de manera temporal», con una contracción de la actividad económica «comparable» a la sufrida en la crisis financiera de 2008, aunque el gobernador del Banco de España confía en que, «en esta ocasión, el daño no será tan persistente en el tiempo como entonces». Aunque para evitar que eso suceda considera crucial que Europa adopte medidas de política económica «fuertes y coordinadas»: «Necesitamos una acción rápida, enérgica y coordinada de los diversos responsables de la política económica para superar la crisis».
Hernández de Cos advirtió sobre la necesidad de no repetir los errores del pasado y recordó que «si cortamos la financiación a los agentes privados, haremos que los efectos de la crisis sean mucho más agudos y, como consecuencia, el aumento de la deuda pública será también mayor». El gobernador del Banco de España, que confirmó que el BCE mantendrá desplegada su artillería de política monetaria «tanto como sea necesario», incrementando incluso el tamaño o la duración de la compra de activos, que asciende a 750.000 millones de euros, cree que no habría que tener miedo a recurrir al MEDE, el fondo de rescate europeo, para afrontar los estragos económicos de la pandemia pese a la posible reacción de los mercados: «Lo que podría generar más pánico sería la inacción de las autoridades europeas», afirmó.
Hernández de Cos defiende desde hace tiempo la necesidad de completar la unión bancaria y dar pasos decididos hacia una mayor integración fiscal en la zona euro que reduzca las vulnerabilidades del proyecto europeo, en un entorno, además, en el que el prolongado e intensivo uso de la política monetaria ha reducido su margen de maniobra. A pesar de ello, el gobernador del Banco de España recuerda que «la política monetaria ya ha reaccionado» en la actual crisis, disparando su bazuca cargado con centenas de miles de millones de euros, al igual que lo han hecho numerosos Estados europeos. Ahora, lo que sigue faltando es «que compartamos los riesgos presupuestarios de los Estados miembros derivados de esta pandemia entre los socios europeos».
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