Hasta el 1 de enero de 2021 no tendrá lugar la desconexión total entre el Reino Unido y la Unión Europea, una vez que expire el período transitorio del Brexit, pero la nueva cepa de coronavirus que ha obligado a Boris Johnson a decretar el confinamiento de Londres y del sudeste de Inglaterra desató este domingo todas las alarmas en la Unión Europea y llevó a muchos estados miembros a cerrar de forma inmediata la puerta al Reino Unido, con el bloqueo de las comunicaciones por tierra, mar y aire, para evitar la propagación del virus en el continente europeo y con ello una tercera oleada que podría ser más contagiosa.
A la decisión adoptada el sábado por Holanda de suspender temporalmente sus conexiones con el Reino Unido se han sumado con medidas excepcionales Bélgica, Italia, Alemania, Irlanda, Austria, Suiza, Portugal, República Checa, Bulgaria, Letonia, Lituania, Estonia y también Francia. «Teniendo en cuenta el nuevo riesgo sanitario, se suspenden todos los flujos de personas del Reino Unido hacia Francia durante 48 horas y para todos los medios de transporte», anunció el primer ministro francés, Jean Castex. El objetivo con este margen de dos días es dar tiempo a «aclarar la situación sanitaria al otro lado del Canal de la Mancha», buscar una «solución adecuada» para los ciudadanos franceses que están en el Reino Unido e intentar buscar una «respuesta común» a nivel europeo.
España no cerró la conexión aérea con el Reino Unido y decidió esperar a una respuesta «común» de la UE. El Gobierno de Pedro Sánchez solo anunció que reforzaría el «control de verificación de pruebas PCR» en los aeropuertos. Ante la cita de los 27 este lunes, fuentes de la Moncloa señalaron que España «defenderá la necesidad de adoptar medidas coordinadas sobre los vuelos procedentes del Reino Unido», porque cualquier decisión «debe ser común y evitar la unilateralidad», informa Juan Ruiz Sierra.
De momento, miembros del gabinete del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, celebraron este domingo una videoconferencia con los ‘sherpas’ de las 27 capitales -los negociadores de los líderes europeos- para abordar la evolución del virus, la nueva cepa e informarse mutuamente de las medidas previstas por las distintas capitales, según anunciaron fuentes europeas. Una coordinación que proseguirá este lunes a nivel de expertos a través del mecanismo de crisis del Consejo.
En América Latina, Argentina, Colombia, Perú y Chile ha anunciado también que restringen su tráfico aéreo con Reino Unido por el momento, al igual que Canadá. La Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo un llamamiento a sus miembros en Europa para «reforzar sus controles» frente a la nueva cepa. «Hay medidas que pueden reducir la propagación. Necesitamos saber cuál es el riesgo», señaló.
Maria Van Kerkhove, epidemióloga de la OMS, explicó en declaraciones a la BBC que en la organización han estado en estrecho contacto con las autoridades británicas intercambiando información. «Hay varios estudios en marcha», sobre la nueva cepa. «Necesitamos comprender qué hace esta variante y cuáles son las implicaciones». También confirmó que se habían encontrado casos de la variante en Holanda, Dinamarca y en Australia. Según el Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC), se habría detectado la nueva cepa también en Bélgica. Y el Ministerio de Sanidad italiano informó este domingo que han detectado en Roma el caso de una persona contagiada con la nueva cepa.
La rápida propagación es la principal característica de la nueva cepa de coronavirus detectada por primera vez en dos muestras tomadas en septiembre en Kent y Londres. Las nuevas variantes son algo frecuente desde que comenzó la pandemia, pero en noviembre empezó a haber pruebas de que esta se trasmitía mucho más rápidamente que el virus original. Esta característica empezó a preocupar a los científicos, que ahora consideran que esta mutación puede ser un 70% más contagiosa.
La nueva variante coronavirus tiene 23 cambios genéticos, algunos de ellos centrados en una proteína fuera del propio virus que puede facilitar el acceso a las células en el cuerpo humano. Los científicos repiten que no hay pruebas por el momento de que la nueva cepa agrave la enfermedad o aumente la mortalidad, pero las investigaciones prosiguen en estos momentos en los hospitales para confirmar este extremo. Tampoco hay pruebas por el momento de que esta variante haga la vacuna menos eficiente.
Powered by WPeMatico