La economía española experimentará un leve retroceso en el primer trimestre del año, según ha augurado hoy el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, quien habría confirmado de esta forma las previsiones de caída de PIB entre enero y marzo avanzadas ya por organismos como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) o el Banco de España.
Escrivá que ha presentado una nueva web con datos estadísticos sobre las medidas anticrisis adoptadas por su departamento, se ha servido de la evolución de los datos de trabajadores que se incorporan a la actividad desde un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para señalar que «aunque hay recuperación de trabajadores en ERTE sobre todo a partir de febrero lo más probable es que veamos una caída (de PIB) pequeñita» en el primer trimestre del año.
Según ha explicado el anterior responsable de la Airef, esta caída de la actividad obedecería sobre todo a que el primer trimestre arrancó de manera «muy floja» y aunque se esté recuperando de manera progresiva, dicho bache inicial «condiciona la media» del trimestre, «y es lo que ha pasado», ha indicado. No obstante, ha precisado que el indicador de trabajadores en ERTE es parcial «pero condensa mucha información». En función de eso, ha añadido: «es muy difícil que (el PIB) termine en positivo» este trimestre.
De esta manera, Escrivá es el primer miembro del Gobierno que reconoce esta posible contracción del PIB, respondiendo así a las críticas del PP que han reprochado al Ejecutivo que no admitiera esta caída. El Banco de España ha sido el último que, temiendo una nueva caída del PIB este primer trimestre, rebajó ayer su previsión de crecimiento para este año del 6,8% que estimó en diciembre al 6%. Estas cifras revisadas del Banco de España se alejan de las más optimistas del Gobierno que prevén un avance inercial del 7,2% que aspira a elevar lo al 9,8% con las ayudas europeas.
El titular de Seguridad Social, ha avanzado también que en las últimas semanas se están reactivando con algo más de dinamismo los trabajadores en ERTE de forma que, aunque la media del trimestre aún está por encima de los 800.000 ocupados, a fecha del lunes pasado, eran 783.000 los asalariados que aún están en ERTE.
La nueva base de datos estadísticos presentada, está dirigida a toda la población, pero especialmente a los investigadores y detalla, por ejemplo, cuestiones de las bajas por incapacidad debidas al Covid-19 o un mapa más descriptivo de todos los afectados por ERTE en la pandemia, refleja situaciones como que un 20% de los afectados por estos ajustes de empleo tenían un contrato temporal. Asimismo, reflejan una mayor estancia en los ERTE de los jóvenes, trabajadores de mayor edad o temporales.
En lo que se refiere a las bajas por incapacidad temporal, Escrivá ha notificado la existencia de 3,8 millones de bajas, de las cuales 1,3 millones han sido de trabajadores infectados directamente por Covid-19 y otros 2,5 millones corresponden a ocupados que han tenido que estar en cuarentena por ser contactos estrechos de un infectado.
Powered by WPeMatico