La Comunidad de Madrid presentará hoy los Presupuestos para 2018, que incluyen dos rebajas fiscales en el IRPF. En concreto, el Ejecutivo de Cristina Cifuentes ampliará las deducciones tributarias para los contribuyentes con hijos y para los inquilinos. Ambas medidas se han negociado con Ciudadanos, cuyos votos son necesarios para sacar adelante las cuentas.
Actualmente, los contribuyentes en la Comunidad de Madrid aplican una deducción de 600 euros por hijo durante un año. Esta ayuda aumenta a 750 euros si es el segundo hijo y a 900 euros para terceros y sucesivos. A partir de 2018, Los contribuyentes que tenga un hijo tendrán derecho a una deducción de 600 euros anuales durante tres ejercicios. Se amplía el período de la deducción, pero no se incrementa la ayuda en función del número de vástagos. El límite para aplicar este beneficio aumenta de los 26.620 euros actuales a 30.000 euros en tributación individual y se queda en 36.200 euros en tributación conjunta.
Respecto a la deducción por alquiler, la legislación vigente establece que los inquilinos menores de 35 años podrán deducirse el 20% del arrendamiento de la vivienda habitual con un máximo de 840 euros. A partir de 2018, el porcentaje de reducción fiscal se incrementa al 30% con un límite de 1.000 euros. La edad para acogerse a esta deducción se amplía también a contribuyentes hasta 40 años si se encuentran en situación de desempleo y tienen cargas familiares. La suma de la base imponible general y la del ahorro no podrá superar los 25.620 euros en tributación individual y los 36.200 euros en conjunta.
Ciudadanos exigió en un primer momento una rebaja de los tipos impositivos para sentarse a negociar los Presupuestos. El Ejecutivo de Cifuentes está dispuesta a bajar los gravámenes, pero no ahora. Las comunidades autónomas tienen una amplia competencia sobre el IRPF, impuesto que tienen cedido al 50%. Madrid es la comunidad que cuenta con tipos menores.
Por otra parte, está previsto que los Presupuestos Generales del Estado para 2018 incluyan una reducción del IRPF que supondrá que los contribuyentes con salarios inferiores a 14.000 euros no pagarán el tributo. Actualmente, el límite está fijado en 12.000 euros. Además, se establecerá una rebaja fiscal para rentas hasta 17.000 euros.
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