El primer semestre del año acabó con un nuevo récord para las exportaciones españolas, que alcanzaron un valor de 147.408 millones de euros. Esa cifra representa sin embargo un crecimiento respecto al mismo periodo del anterior del 1,7%, el más exiguo de los últimos cinco años. A la vez, también las importaciones crecieron (1,6%) hasta máximos históricos. España compró mercancías por valor de 162.120 millones de euros, lo que sigue arrojando un saldo negativo en la balanza comercial de 14.712 millones, un 0,9% más que en el primer semestre de 2018. Las cifras han sido difundidas este miércoles por el ministerio de Industria, Comercio y Turismo a partir de los datos de comercio declarados en Aduanas.
Por sectores, destaca el crecimiento de las ventas de bienes de equipo, que aumentaron un 6,7% y representaron más de una quinta parte del total de exportaciones. La segunda categoría de productos que más exportó España fue la de alimentación, bebidas y tabaco, que creció un 3,5% interanual. En cambio, el tercer sector más exportador, el del automóvil, vio cómo sus ventas al exterior cayeron un 5,7% respecto al mismo periodo del año anterior. Junto con las materias primas, fueron los únicos sectores que lastraron las exportaciones entre enero y junio.
Por destinos, la UE sigue acaparando dos tercios de las exportaciones españolas. Estas aumentaron un 1,5% interanual, lo que hizo crecer el superávit comercial de España con el conjunto de sus socios europeos hasta los 10.950 millones de euros. Mientras, con los países extracomunitarios el déficit se ensanchó hasta los 25.668 millones pese a que las ventas fuera de la Unión aumentaron un 2,2% en el periodo. Por países, donde más mejoraron las exportaciones españolas fue en Portugal, EE UU, Suiza y Singapur. Donde más empeoraron fue en Turquía, Bélgica, Argentina y Arabia Saudí. Esto no significa que esos fueran los países con mayor intercambio comercial, ya que el principal destino de las mercancías españolas sigue siendo Francia, Alemania e Italia.
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