En agosto, el mes de vacaciones por excelencia, los depósitos que las familias españolas tenían en los bancos se situaron en 939.900 millones de euros, un 5,3% más que en la misma fecha del año anterior, aunque ligeramente por debajo de los 942.900 millones de julio, según los datos provisionales del Banco de España.
Tradicionalmente, los depósitos de las familias bajan en los meses de verano, para hacer frente a gastos extraordinarios como las vacaciones o la vuelta al colegio, pero este año en julio se notó la prudencia impuesta por las consecuencias de la pandemia de coronavirus. Y es que ese mes no se cumplió la pauta vacacional y los depósitos subieron hasta la cifra más alta de la serie histórica que comienza en 1989.
El descenso registrado en agosto frente a julio es de 3.000 millones de euros, el 0,32% menos, y rompe con once meses consecutivos de ascensos, pero en tasa interanual, desde agosto de 2020, el dinero depositado se ha incrementado en 47.400 millones de euros. Por lo que respecta a los depósitos de las empresas, han crecido en agosto hasta 298.000 millones de euros, un 2,2% más que un año antes y 3.500 millones de euros más que en julio.
El conjunto de los depósitos de hogares y empresas residentes en España se situó en agosto en 1,237 billones de euros, una cifra un 4,54% superior a la de un año antes, como consecuencia del ahorro acumulado por sociedades y familias ante la incertidumbre generada por la pandemia del coronavirus. Respecto al mes de julio, el avance fue del 0,04%
Los depósitos del total de los residentes en España se situaron en 1,572 billones de euros en agosto, un 0,24% por encima de julio y un 4,16% más que en el mismo mes de 2020. El importe de los depósitos de los residentes en España más el de los que están en el extranjero aumentó un 0,17% en el mes de agosto y un 4,8% en un año, hasta 1,625 billones de euros.
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